martes, 1 de diciembre de 2009

Una de encuestas, sindicatos y pasión por el Euskera


La obsesión del lehendakari López por salir en la foto de los periódicos llega hasta el extremo tal que no le importa posar haciendo el ridículo. Esta vez lo hizo cantando canciones en un idioma, el Euskera, que apenas conoce,y firmando un acuerdo con ELA que hace temblar las arcas del Gobierno Vasco, justo cuando las encuestas dicen que su popularidad está por los suelos y los anteriores lehendakaris cuestionan su trabajo al frente del ejecutivo, sólo para salir en la foto y desviar la atención.

La leyenda dice que los rockeros de tiempos ancestrales, y no tanto, perdían los estribos con tres cosas: sexo, drogas y rockanroll. Al lehendakari López le pierden estos días otras tres cosas: las encuestas, los sindicatos y su nula pasión por el Euskara; un cócktel al que el responde, como no, saliendo en el periódico con intención de despistar a la opinión pública.

El gran error versa en que el lehendakari no se da cuenta de que a estas alturas de la película la gran mayoría de la sociedad ya le tiene calado. Las encuestas rara vez mienten - acaso pueden estar algo infladas, pero mentir no mienten - y ponen al ejecutivo vasco socialista a ras del suelo, a los pies de los caballos, muy por debajo del aprobado.

Imagínense. Una mañana plácida en Ajuria-enea. Patxi López sentado en su sofá con su Ipod escuchando a la Tuna Compostelana. Suena el teléfono rojo. Es su asistente de imagen. "Patxi que las encuestas dicen que tu ejecutivo no aprueba de largo". Silencio. Prosigue su asistente: "Te pesan el pacto de estabilidad con el PP, las broncas con ZP, los carteles, las ikurriñas de los uniformes de la Ertzantza, tu nula utilización y preocupación por el Euskara...". Después de tres minutos, el lehendakari López reacciona: "Tranquilo, mañana nos sacamos unas fotos con los de Iparralde cantando canciones de Laboa, y seguido firmo un pacto con los sindicatos para mejorar las condiciones de los funcionarios. Les damos seis días más libres al año y subimos como la espuma".

Evidentemente López cumple con su promesa y, así, le hemos visto estos días en el periódico. Primero firma un pacto con el sindicato mayoritario en Euskadi, ELA, buscando la que denomina "foto de encuentro" con un sindicato nacionalista. A cambio, se produce un terremoto en las arcas del Gobierno Vasco, que se verán desinfladas sobremanera. Y seguido coge el coche y se marcha a Aquitania, Iparralde. Por el camino coge el teléfono: "Françoise, oye que digo yo que me contrates a algún coro de Bayonna o Hendaya, que se sepa el Boga Boga y, también, el Txoria-Txori de Mikel Laboa". Su cancionero no alcanza mucho más.

Pero, craso error, se le olvidó pedir la ikurriña. Así cuando llegó y posó con el coro de Iparralde, sólo gesticuló porque no se sabía "Egun da Santimamiña", y firmó lo que se considera el primer paso para la eurorregión vasca junto a una bandera Española, por no decir que dijo que su padre de joven le había dicho que estudiara francés. ¿Y Euskara? Si firma para crerar una eurorregión vasca, y hace que canta en euskara, ¿acaso no se deberia plantear estudiarlo? Como dicen los jóvenes de hoy en día, "menuda pasión de palo".

Se le volvió a ver el plumero señor López. Es posible que crea que los ciudadanos somos tontos, pero ya no nos cuela una más. Sus fotos en los periódicos no hacen sino provocarnos ataques de risa.

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